
Con la llegada del otoño, observamos como nuestro paisaje va cambiando. Las hojas de los árboles están cayendo y es un momento genial para pasar un día por el campo para recolectar diferentes tipos de hojas.
La naturaleza nos brinda un espectáculo visual muy bello. A través de la observación y exploración, niños y niñas aprenden sobre cómo va cambiando la estación y el paisaje y sobre todo, conocer los diferentes tipos de hojas y sus partes.
A través de este tipo de actividades sensoriales tan vivenciales y experimentales, niños y niñas pueden plantear hipótesis, recrear su creatividad, conocer diferentes tipos de árboles…
Gracias a la magia de la mesa de luz, a mi parecer un recurso de gran utilidad sobre todo en la etapa infantil, vamos a descubrir las partes de los distintos tipos de hojas que hemos ido consiguiendo.
Para reforzar conceptos, nos apoyamos en un libro que nos encanta y lo tenemos desde hace un tiempo. Por casa somos amantes de la lectura y siempre que se puede, reforzamos a través de la lectura. En este caso nuestro libro elegido es “el árbol”.

Materiales necesarios para descubrir el otoño en la mesa de luz
- Mesa de luz
- Hojas de diferentes tipos y tamaños
- Lupa
Desarrollo de la actividad sensorial el otoño en la mesa de luz
Para comenzar la actividad sensorial, lo primero que tenemos que hacer es conseguir muchos tipos de hojas. Pasar el domingo en el campo nos ha servido para conseguir algunas hojas nuevas.
Nosotros por casa, tenemos algunas hojas plastificadas que nos acompañan desde que Eme era bien pequeño. Vamos ampliando nuestro catálogo de hojas en función a lo rara que sea, sobre todo si estamos de viaje en una ciudad diferente a la nuestra.

Una vez tenemos las hojas preparadas, las colocamos sobre la mesa de luz y encendemos nuestra mesa de luz. Tan fácil como eso. Ahora es el momento de investigar y explorar. Eme coge su lupa para ver más de cerca las partes de una hoja.
Me cuenta y observa que hay diferentes tipos de hojas, que tienen colores diferentes y la textura en algunas también varía.
Siempre me gusta reforzar conceptos a través de los libros. El gusto por la lectura, considero que es algo a cultivar y por casa estamos rodeados de cuentos. En este caso, para la actividad sensorial del otoño de hoy, cojo un libro que se llama «el Árbol«. Se lo expongo para que él pueda también averiguar si tenemos algunas hojas como las que muestra el libro, o de las que hemos conseguido durante la recolecta.
También cogemos el libro de las cuatro estaciones, para enfocarnos en el otoño.
A través de la mesa de luz, se puede observar claramente los nervios de las hojas. Este momento es genial para completar actividad sensorial si son más mayores, dibujando una hoja y colocando sus partes.
Eme dibujó una hoja muy bonita en papel para hornear, ideal para dibujar en la mesa de luz y calcar.
Es un gran proyecto de ciencias naturales, en el que a través de su propia experimentación y exploración, niños y niñas descubren y aprender sobre los tipos de hojas que hay en su entorno y las partes de las hojas.
Además si las plastificas como nosotros, pueden servirte en muchas ocasiones, ya que a ellos les encanta investigar con la mesa de luz y con la lupa.
Para finalizar la actividad del otoño, animé a Eme a que con todas las piñas, hojas y palitos que teníamos, hiciera un gran mandala en la mesa de luz.
Gran tarde jugando con la mesa de luz y con elementos de la naturaleza que nos ofrece el otoño. Si no tienes una mesa de luz, puedes presentar el otoño en una caja o bandeja sensorial, que también disfrutan mucho.
Cathalina
Esta genial el aporte. Un cordial saludo.
Alejandra Román
Hola Cathalina. Muchas gracias por tus palabras. Un saludo para tí también.